domingo, 9 de octubre de 2011

OTOÑO


Vamos a ver, el otoño me apasiona, por qué? Es la época en la que los árboles se desnudan, sus hojas se caen (los de hoja caduca claro pero son los que me molan). Estas hojas se quedan en los pies de los árboles. A lo largo del otoño estas hojas se descomponen, se filtran por la tierra y llegan a ser algo que se llama "humus" o algo así, el caso, que es el mejor abono para el propio árbol. Es lo que más lo alimenta, lo hace fuerte, más grande... Llega el frío invierno y el árbol sigue desnudito, no tiene hojas, y ahí está frente a la lluvia, la nieve y las bajas temperaturas el tronco y las ramas, solos, sin nada que les proteja. ¿Por qué resiste? Esa hojas que cayeron lo han renovado, le han dado fuerza y crecimiento.
Pues eso pasa con las experiencias personales, buenas y malas, las hojas para mi representan esas experiencias, no debemos olvidarlas ni renunciar a ellas, simplemente enriquecernos, que formen parte de nosotros para enfrentarnos a lo que la vida o el invierno nos depara. La hojas de los árboles se convierten en "savia" y nuestras hojas, nuestras experiencias se convierten en SABIDURÍA.

jueves, 6 de octubre de 2011

Lo difícil

Lo fácil es buscar otro cuerpo, buscar en sus ojos el brillo de los tuyos, esconder tus caricias bajo otras manos y ser feliz en un propio inventado de mentiras.
Lo difícil es mirarse dentro, ir sacando de mi cada parte de ti, uniendo el puzzle en el que me convertiste, de corazón roto, infección de miedo y ambiente desconfiado. Tirar las piezas que no me interesan, convertirme en lo que quiero y pasar por encima del mal que me hiciste.
Lo fácil buscar cualquier labio, que me abrace cualquiera cuando llegue el frío, a fi nde cuentas ya l odice el refranero popular... a rey muerto, rey puesto.
En este caso decido que soy mi propia reina reconquistando mi reino de batallas pasadas, llenando de flores que inunda de colores todo l oque antes fueron malas hierbas.
Lo mejor de todo... es que al leer algo como esto que escribí hace unos meses... me doy cuenta de que ya no te busco detrás de nadie...